FaCEtas Educativas
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DE FONDO
CARMEN SÁNCHEZ
El derecho a la educación y
el derecho al aprendizaje:
compromiso ético con la
mejora de la experiencia
formativa del estudiantado
“Toda persona tiene derecho a una educación
integral, de calidad, permanente, en igualdad de
condiciones y oportunidades, sin más limitaciones
que las derivadas de sus aptitudes, vocación y
aspiraciones”.
Artículo 63
Constitución de la República Dominicana
2010
“La educación dominicana estará siempre
abierta al cambio, al análisis crítico de sus resultados
y a introducir innovaciones”.
Artículo 63
Ley General de Educación 66-97
te se desarrolla en el país por mandato institucio-
nal, tanto del Plan Decenal de Educación 2008-
2018, como de la Ordenanza 02-2011 emanada
del Consejo Nacional de Educación del Ministerio
de Educación de República Dominicana (MINERD),
haciendo la salvedad de que este ha sido un pro-
ceso de construcción conjunta, orientado desde la
participación de distintos actores y sectores de la
comunidad educativa dominicana.
Estas notas sintetizadas se comparten en per-
manente actitud de apertura para la construcción
de posibilidades dialógicas, propositivas y enrique-
cedoras, alrededor del Proceso de Revisión y de Ac-
tualización Curricular, tomando en consideración
algunos marcos y referentes normativos, compro-
misos de Estado, así como sustentaciones emana-
das desde una diversidad de evidencias científicas
que nos conminan hacia la búsqueda de nuevas
perspectivas para la construcción y el fortaleci-
miento de la calidad de la educación dominicana
como un derecho de primer orden de todos los ciu-
dadanos y ciudadanas.
El propio proceso demanda del compromiso
de todos los sectores y actores que tienen mucho
que aportar, alrededor de algunas de las preguntas
Introducción
La reflexión que compartimos constituye una
breve síntesis narrativa en relación al Proceso de
Revisión y Actualización Curricular que actualmen-
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FaCEtas Educativas
DE FONDO
claves que permanentemente se plantea el currícu-
lo: para qué, por qué, qué, cómo, cuándo, dónde,
con qué, con quién aprenden las y los estudiantes.
En sentido general ¿Qué se promueve desde
la escuela?
¿Para qué van las niñas, niños, jóvenes y adul-
tos a la escuela?
¿Cómo se apoyan los procesos de construc-
ción de ciudadanía y los proyectos de vida de las
personas?
Cada niña, niño, joven o adulto visualiza en
la escuela y en su educación una puerta abierta
de oportunidades para hacer realidad sus sueños
de superación y de mejoramiento de su calidad de
vida, en los distintos contextos socioculturales en
los que habitan.
La mejora continua de los procesos formati-
vos de todos los niños, niñas, jóvenes y adultos se
constituye en un imperativo ético de primer orden,
en virtud de la necesidad de ofrecer cada vez más
y mejores oportunidades de aprendizaje a lo largo
de toda la vida, para que la ciudadanía pueda te-
ner derecho a una educación de calidad sin ningún
tipo de exclusión, siendo la escuela una plataforma
sumamente poderosa, siempre y cuando se preser-
ve al más alto nivel el sentido ético alrededor del
compromiso que tiene el Estado de ofrecer todas
las garantías, para que a través de la oferta educa-
tiva todas y todos puedan ser apoyados en su pro-
ceso de constitución como sujetos libres, autóno-
mos, críticos, creativos, autocríticos y propositivos,
a partir de las oportunidades que les ofrece una
educación pertinente y de calidad.
La sociedad dominicana está desafiada para
dar cada vez más lo mejor de sí misma y en el con-
texto de la educación de la ciudadanía, tiene un
pilar y una aliada de primer orden para el logro
de sus metas y propósitos de mejora, a todos los
niveles y en todos los órdenes.
En este sentido, cada día cobra mayor relevan-
cia y sentido de urgencia todo lo referido a la me-
jora de los procesos formativos, para la concreción
de más y mejores oportunidades de aprendizaje,
que como derecho les corresponde a todos los ni-
ños, niñas, jóvenes y adultos a lo largo de toda su
vida.
De ahí que, entre otros aspectos, es un com-
promiso:
• Posibilitar que a toda la población, en sus dis-
tintas etapas de desarrollo humano, se le ga-
rantice la oportunidad de una educación de
calidad y sin exclusiones, basada en la igualdad
y en el respeto a los derechos humanos, en pos
de una vida digna y un ejercicio de ciudadanía
responsable.
• Propiciar que los itinerarios formativos de las
generaciones presentes y futuras vayan ajus-
tándose y anticipándose a las necesidades de
desarrollo pleno e integral de los sujetos, así
como a las demandas que plantea la sociedad
actual como colectivo en donde todas y todos
convivamos de manera armónica, pacífica y en
contextos colaborativos.
• Poner en sintonía el sistema educativo con las
demandas y expectativas globales, internacio-
nales, nacionales y locales, otorgando cohe-
rencia y direccionalidad a los planes de acción
pedagógica, respecto a las finalidades y orien-
taciones, asumiendo que todos los actores
educativos aprenden los unos de los otros en
todos los contextos socioculturales.
• Fortalecer la redefinición de los perfiles del per-
sonal directivo, técnico, docente, administrati-
vo y de apoyo, asegurando la capacidad para
gestionar el Sistema Educativo con calidad.
• Consolidar una práctica y un ejercicio profesio-
nal profundamente reflexivos y participativos,
bajo un liderazgo cada vez más incluyente,
participativo y comprometedor, aunando es-
fuerzos, voluntades y compromisos, ya que la
mejora es un proceso que nos implica a todas
y a todos.
FaCEtas Educativas
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DE FONDO
• Continuar fortaleciendo los vínculos estratégi-
cos con las Instituciones de Educación Superior
(IES) desde las academias que están compro-
metidas con el cambio y con la mejora soste-
nida de la formación inicial y continua de las y
los docentes.
Como colectividad y como Estado estamos re-
tados y comprometidos a propiciar el desarrollo de
todas las potencialidades de la ciudadanía desde
sus primeros años de vida, en perspectiva de inte-
gralidad y de plenitud, para el fortalecimiento de
una cultura y de una ética personal y social cada
vez más implicada con la necesidad de apoyar la
construcción de sujetos retados y comprometidos
por una nueva conciencia ciudadana. Seres huma-
nos libres y con autonomía que, como sujetos de
derecho, van construyendo procesos formativos
relevantes y de significación de la mano del cono-
cimiento, de la ciencia, de la cultura, de sus expe-
riencias previas en diálogo permanente con los sa-
beres que circundan en la diversidad de contextos
socioculturales en los que habitan.
Hoy día, no se trata solo de tener acceso a la
educación: se demandan otros componentes cuali-
tativos fundamentales que puedan desafiar perma-
nentemente la dinámica formativa y los procesos
de construcción de conocimiento para el desarro-
llo a plenitud de todas las capacidades, valores y
actitudes claves que demandan tanto los sujetos
como los distintos contextos en los que habitan,
permanentemente desafiados por el presente y
por el porvenir en perspectiva de fortalecimiento
del sentido de dignidad.
Son notables los esfuerzos realizados para la
construcción de propuestas educativas participati-
vas, orientadas hacia el fortalecimiento de políticas
de Estado y de procesos de cambio en el Sistema
Educativo dominicano, entre los cuales se pueden
señalar: a) la Reforma Educativa de los años 90 en
el contexto del Plan Decenal de Educación 1992-
2002; b) los acuerdos desde el Plan Estratégico
de Desarrollo de la Educación Dominicana 2003-
2012; c) los compromisos desde el Foro Presiden-
cial por la Excelencia de la Educación Dominica-
na 2007; d) los Objetivos del Milenio; e) el Plan
Decenal de Educación 2008-2018; y f) las Metas
2021, promovidas por la Organización de Estados
Iberoamericanos(OEI); entre otros grandes esfuer-
zos para la mejora de la calidad educativa.
En contextos más recientes, resultan significa-
tivos los esfuerzos que con visión sistémica se han
ido impulsando desde el Sector Educación, tales
como la Iniciativa Dominicana para una Educación
de Calidad (IDEC), la Estrategia Nacional de Desa-
rrollo 2030 (Ley 1-12), el Plan Nacional Plurianual
del Sector Público, el Pacto Nacional para la Re-
forma Educativa 2014-2030, entre otros acuerdos
conjuntos Estado-Sociedad, nacionales e interna-
cionales, asumiendo que pobreza no es solamen-
te la falta de ingresos, sino que también cuando
faltan capacidades, competencias y oportunidades
se debilitan las posibilidades del sujeto en sus re-
laciones intra e interfamiliares, comunitarias y con
la sociedad.
Son numerosos los esfuerzos y las iniciativas
que desde las academias comprometidas con la
formación de docentes se han desarrollado para
apoyar los procesos orientados a desarrollar más y
mejores experiencias formativas para todas y todos
los estudiantes.
De ahí que no se trata, entonces, de esfuerzos
aislados. Hay toda una correlación sinérgica alre-
dedor de la mejora de los procesos de aprendizaje
en todos los niveles educativos y formativos. Hay
toda una necesidad de mirada sistémica, articulada
y valoradora de la diversidad de factores asocia-
dos internos y externos que tienen que ver con las
dinámicas de mejora, tanto de la oferta como de
la experiencia formativa en los distintos contextos
socioculturales.
A continuación compartiremos brevemente al-
gunas reflexiones fundamentadas en marcos nor-
mativos y referenciales que gravitan alrededor del
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FaCEtas Educativas
DE FONDO
Proceso de Revisión y de Actualización Curricular
que actualmente se va desarrollando paulatina-
mente en el país, asumiendo que tampoco el currí-
culo puede situarse en una perspectiva desarticu-
lada de diversidad de realidades, factores macro y
microcontextuales interdependientes, que de ma-
nera sistémica convergen y hacen de la dinámica
de desarrollo curricular un hecho profundamente
articulado y articulador de situaciones y de reali-
dades.
El Proceso de Revisión y Actualización Curricu-
lar, tal y como lo señalan los Fundamentos Curricu-
lares vigentes, “parte del convencimiento de que la
educación y la escuela tienen un papel preponde-
rante que cumplir en el mejoramiento de la calidad
de vida de la nación dominicana y en sus esfuer-
zos por fortalecer la democracia” (SEEBAC,1994;
p.1), pues el currículo viene a constituirse en la
estrategia clave de la educación para el logro de
las intenciones educativas, al tiempo que expresa
la fundamentación y orientación del proceso for-
mativo, asumiendo el compromiso de promover el
desarrollo de las capacidades humanas (MINERD,
2016).
Durante este proceso que se ha asumido en
perspectiva progresiva y por etapas, se revisa el
Diseño Curricular puesto en vigencia mediante la
Ordenanza 1-95 del Consejo Nacional de Educa-
ción, manteniéndose vigentes, por considerarlos
altamente cónsonos con las visiones y los princi-
pios que lo sustentan desde una construcción alta-
mente participativa y representativa de los distintos
actores y sectores de la sociedad dominicana, los
Fundamentos del Currículo de la reforma educativa
de los años noventa.
Proceso de Revisión y
Actualización Curricular:
Compromisos de Estado,
Fundamentación y Justificación
La Constitución de la República Dominicana
establece que “toda persona tiene derecho a una
educación integral, de calidad, permanente, en
igualdad de condiciones y oportunidades, sin más
limitaciones que las derivadas de sus aptitudes, vo-
cación y aspiraciones. En consecuencia, la educa-
ción tiene por objeto la formación integral del ser
humano a lo largo de toda su vida y debe orientar-
se hacia el desarrollo de su potencial creativo y de
sus valores éticos. Busca el acceso al conocimiento,
a la ciencia, a la técnica y a los demás bienes y va-
lores de la cultura” (Art. 63).
También la Ley de Educación 66-97 postu-
la que “la educación dominicana estará siempre
abierta al cambio, al análisis crítico de sus resulta-
dos y a introducir innovaciones. Los cambios deben
ser producto de las necesidades, de la reflexión, de
las investigaciones y del aprovechamiento de ex-
periencias anteriores. Las innovaciones nacionales
tomarán en cuenta el desarrollo de la educación a
nivel internacional” (Art. 63).
Ya anteriormente, la misma Ley había expli-
citado el compromiso ético de “formar personas,
hombres y mujeres, libres, críticos y creativos, ca-
Hay toda una correlación sinérgica
alrededor de la mejora de los
procesos de aprendizaje en todos
los niveles educativos y formativos.
Hay toda una necesidad de mirada
sistémica, articulada y valoradora de
la diversidad de factores asociados
internos y externos que tienen que
ver con las dinámicas de mejora,
tanto de la oferta como de la
experiencia formativa en los distintos
contextos socioculturales.
FaCEtas Educativas
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DE FONDO
paces de participar y construir una sociedad libre,
democrática y participativa, justa y solidaria; aptos
para cuestionarla en forma permanente; que com-
bine el trabajo productivo, el servicio comunitario
y la formación humanística, científica y tecnológica
con el disfrute del acervo cultural de la humanidad,
para contribuir al desarrollo nacional y a su propio
desarrollo” (Art. 5).
De igual manera, otro referente vital para el
Proceso de Revisión y Actualización Curricular lo
constituye el Plan Decenal de Educación, que en su
Política No. 3 plantea la necesidad de “Revisar pe-
riódicamente, difundir y aplicar el currículo apro-
bado, promover una cultura de su cumplimiento
desde una perspectiva de formación en valores
que promueva el desarrollo humano integral y el
uso del currículo como norma y como guía de las
grandes decisiones dentro del sistema, consolidan-
do todas las demás dimensiones de la ciencia en
los niveles educativos así como el uso y enseñanza
de las Tecnologías de la Información y la Comuni-
cación (TIC)” (SEE, 2008; p. 27 ).
Desde este marco normativo vigente cobra
significación el mandato declaratorio en relación
a que la revisión, difusión y aplicación del currículo
se constituye en una política valiosa “que legitima
y da visibilidad al currículo, en cuanto elemento o
componente fundamental en el proceso de cons-
trucción de la calidad de la educación dominicana
en todos sus niveles y modalidades”, al tiempo de
hacer explícito al interior de la Política No. 3 el he-
cho de que “se fomenta la revisión integral del cu-
rrículo, con el enfoque de competencias” (Ibídem).
La Ordenanza Nº 02-2011 de fecha 26 de abril
de 2011 emanada del Consejo Nacional de Educa-
ción, se refiere al currículo como el fundamento y
la estrategia clave para la formación de las ciuda-
danas y ciudadanos del presente y del futuro que
demanda de un compromiso con el cumplimiento
del horario y del calendario escolar, para contribuir
de esta manera con una mejor comprensión y con-
creción del mismo.
Desde el Proceso de Revisión y de Actualización
Curricular se valora y se resignifica la importancia
del Currículo Nacional como itinerario formativo y
como referente de orientación fundamental, desde
donde se expresan los saberes, valores, actitudes,
conocimientos y competencias que deben integrar
los ciudadanos para el ejercicio de sus derechos y
de sus deberes, ponderando de manera crítica y
propositiva todos los factores claves asociados a
la mejora de los logros de aprendizaje, así como
desarrollo pleno e integral de las y los estudiantes,
incluidos los contextos socioculturales y familiares.
Por su parte, la Estrategia Nacional de Desarro-
llo señala la siguiente necesidad:
Revisar periódicamente los currículos de todos
los niveles preuniversitarios y asegurar su plena
implementación como guía del diario queha-
cer de las escuelas, con el fin de garantizar su
pertinencia con el desarrollo de capacidades
para el aprendizaje continuo, y la formación en
valores y principios éticos, incluyendo los vin-
culados al desarrollo sostenible, la gestión de
riesgos, los derechos humanos, la igualdad y la
equidad de género, la ciudadanía responsable
y la convivencia pacífica (República Dominicana
Ministerio de Planificación y Desarrollo, 2012;
objetivo 2.1.1.7).
El Pacto Nacional para la Reforma Educativa
en la República Dominicana (2014-2030) establece
como prioridad el compromiso de:
Desarrollar en el estudiantado de los diferen-
tes Niveles, Modalidades, Subsistemas y Sub-
sectores, las competencias para el dominio de
la lengua y otras habilidades comunicativas;
el pensamiento lógico-matemático, creativo y
crítico; la capacidad para resolver problemas y
tomar decisiones; la actitud investigativa, el tra-
bajo colaborativo, la valoración de los aportes
de la ciencia y el cuidado del medio ambiente;
así como una conciencia ética ciudadana y una
actitud para aprender durante toda su vida.
Es por ello que explicita la necesidad de asumir,
como ciudadanas y ciudadanos, que:
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FaCEtas Educativas
DE FONDO
La educación es un derecho y un bien público
de acceso universal y con equidad, orientada
a construir ciudadanía plena mediante la for-
mación integral de personas conscientes de
sus derechos y sus deberes, respetuosas de los
principios y valores constitucionales, personas
autónomas, solidarias, éticas y socialmente
responsables, comprometidas con la igualdad
y equidad de género, la atención a la diversi-
dad, el uso sostenible de los recursos naturales
y la protección del medio ambiente; personas
capaces de vincularse de manera crítica, creati-
va y transformadora con el progreso científico-
técnico, social y cultural, e integrarse activa-
mente al desarrollo nacional y a la construcción
de una sociedad más justa, solidaria, inclusiva e
intercultural a nivel local y global, para vivir de
manera digna y pacífica (ibídem).
También las Metas Educativas 2021 suscritas
entre el Estado Dominicano y la Organización de
Estados Iberoamericanos para la Educación, la
Ciencia y la Cultura (OEI) especifican en su Meta
General Quinta el compromiso de “Mejorar la cali-
dad de la educación y el currículo escolar”, y en su
Meta Específica 11, el compromiso con “Mejorar el
nivel de adquisición de las competencias básicas y
de los conocimientos fundamentales por parte de
alumnas y alumnos” (OEI, 2008).
Actualmente, diversidad de pruebas, estudios
e informes (UNESCO, 2013; OECD, 2015; ICCS,
2009; MINERD, 2016), tanto nacionales como in-
ternacionales, señalan que los resultados de apren-
dizaje de los estudiantes y las estudiantes deben
ser mejorados, realizándose todos los esfuerzos
que sean necesarios para elevar significativamente
los niveles de desempeño de quienes ven en la es-
cuela más y mejores oportunidades de aprendizaje,
para apoyar el mejoramiento de su calidad de vida
y la de sus familias.
Se asume que la educación constituye el es-
cenario idóneo para continuar apoyando el desa-
rrollo de las distintas capacidades, competencias y
potencialidades que tienen todas y todos los ciu-
dadanos desde los primeros años, y desde las dis-
tintas dimensiones inherentes al desarrollo pleno,
armónico e integral de su ser.
El proceso de revisión y
actualización curricular: la
Consulta Social y la Consulta
Técnica
En este proceso se abrió una diversidad de es-
pacios participativos para que distintos sectores y
actores de las comunidades, del ámbito académico,
científico, cultural y social, incluidos docentes de
aula junto a sus estudiantes, entre otros, pudieran
aportar desde su experiencia y desde su formación,
perspectivas orientadoras y sustentadoras para los
procesos de mejora que se introducen en el pro-
ceso de revisión al itinerario formativo en el que
se constituye el currículo, en permanente proceso
de construcción y asumido como referente dialó-
gico permanentemente abierto a las posibilidades
creativas y enriquecedoras, tanto de las docentes y
los docentes, como de la diversidad de contextos
socioculturales en los que se desarrolla la práctica
educativa. De ahí el valioso significado que desde
el proceso de le otorgó tanto a la Consulta Social
como a la Consulta Técnica.
Consulta Social: En el marco de la Consulta
Social, se ha asumido que la educación se constitu-
ye en un compromiso de todos y todas, valorando
el hecho de que la sociedad dominicana reclama
y merece mejores resultados de aprendizaje para
todas y todos sus estudiantes. Desde esta fase ha
sido muy significativo concitar el interés y el apoyo
de diversas personas y sectores interesados en par-
ticipar, aportando sus expectativas, sugerencias,
expectativas y propuestas para la mejora.
Desde la Consulta Social, realizada en las die-
ciocho (18) Direcciones Regionales de Educación,
se recogieron y sistematizaron los distintos apor-
tes, los cuales sirvieron de insumo base para las
fases posteriores, dado su elevado nivel de signi-
ficatividad. En el marco de la Consulta Social, se
acuñó la expresión de que después de la Consti-
tución de la República, el currículo se constituye
FaCEtas Educativas
41
DE FONDO
en un referente de primer orden de la sociedad,
en virtud de que desde ese itinerario formativo se
apoya el desarrollo pleno e integral de todos sus
ciudadanos y ciudadanas.
Cada Dirección Regional realizó su propia con-
vocatoria, partiendo de una lista de entidades,
sectores, organizaciones y actores representativos
de la comunidad que deberían ser consultados.
Participaron padres y madres de familia, empresa-
rios, representantes de gremios y de profesiones
varias, representantes de las iglesias y de organi-
zaciones sociales, así como alcaldías, municipios
y otras dependencias públicas. En cada Regional
hubo al menos diez mesas de trabajo, siete de las
cuales correspondieron a los niveles Inicial, Básico
y Medio; a las modalidades Técnico-Profesional y
Artes; y a los subsistemas de Educación, Educación
Especial y Educación de Personas Jóvenes y Adultas
(MINERD, 2016
a
), quienes respondieron algunas
preguntas, tales como las siguientes:
1. ¿Cuál es el tipo de ciudadano o ciudadana
que requiere el mundo actual y cómo están con-
tribuyendo la escuela y otras instancias educativas
(familias, medios de comunicación, iglesias y otras
instituciones y organizaciones sociales) a su forma-
ción?
2. ¿Cuáles competencias deben desarrollar los
niños, niñas, jóvenes y adultos dominicanos del si-
glo XXI?
3. ¿Cuáles aportes generados por la ciencia, la
tecnología, las artes y la cultura en general deben
ser incorporados al currículo dominicano?
4. ¿Cómo puede la escuela mejorar su oferta
educativa en coherencia con el egresado y la egre-
sada que necesita la sociedad de hoy?
Consulta Técnica. Dada la necesidad de una
mirada analítica, reflexiva y con mayores niveles de
profundidad alrededor de los distintos componen-
tes del currículo, además de la Consulta Social, se
diseñó un amplio proceso de consultas técnicas a
nivel nacional, desde las cuales se realizaron valio-
sos y significativos aportes provenientes de distin-
tas personas, profesionales, especialistas, así como
sectores de la comunidad educativa y científica,
para el fortalecimiento de la meta de contar con
un currículo revisado, actualizado, coherenciado y
secuenciado, alrededor de las competencias fun-
damentales que, producto de tales consultas socia-
les y técnicas, se determinó que debían desarrollar
los estudiantes y las estudiantes en todos los ni-
veles, modalidades y subsistemas, en los distintos
contextos sociales y culturales.
Desde la Consulta Técnica se ha asumido el
Proceso de Revisión y Actualización Curricular como
una responsabilidad de primer orden, en virtud de
la relevancia científica, tecnológica, académica, po-
lítica, económica, social, cultural e histórica que un
compromiso como este entraña, en un contexto
mediado por la complejidad, el cambio y la aper-
tura, altamente retador, al tiempo que se valoran
los aportes cualitativos para la formación de niños,
niñas, jóvenes y personas adultas como sujetos que
demandan de una educación actualizada, relevan-
te, pertinente, trasformadora y retadora de todas
sus capacidades y potencialidades, sin exclusión.
En este contexto, especialistas, docentes y re-
presentantes de distintos sectores, organizaciones
e instituciones reflexionaron a profundidad en re-
lación a la necesidad de propiciar las condiciones
óptimas para contribuir a la formación integral de
sujetos con las competencias, actitudes y valores en
el orden científico y humanístico, capaces de inser-
tarse en los distintos contextos de manera crítica,
creativa y propositiva, a partir de la expansión al
máximo de todas sus capacidades y potencialida-
des, tomando en consideración las sugerencias y re-
comendaciones emanadas desde la Consulta Social.
La consulta técnica se abordó en tres etapas:
• Identificación de criterios para la revisión
• Deliberación y toma de decisiones en torno
a los cambios que han de ser introducidos
• Redacción del diseño revisado y actualizado
42
FaCEtas Educativas
DE FONDO
Fueron ponderados los vertiginosos procesos
de cambio global y local que impactan los compor-
tamientos de los sujetos en la sociedad y que tocan
ámbitos de la cultura en los distintos contextos, in-
cluyendo los mercados laborales y el ámbito edu-
cativo, los acelerados procesos de transformación
inherentes a la sociedad del conocimiento y de la
información, la necesidad de mayores niveles de
coherencia en relación a las expectativas de apren-
dizaje y los procesos formativos de las y los estu-
diantes, así como la necesidad de que los itinerarios
formativos de las generaciones presentes y futuras
vayan ajustándose y anticipándose a las demandas
que plantea la sociedad actual, en consonancia con
las demandas de los sujetos para garantizarles el
derecho al desarrollo humano integral.
Se analizaron experiencias nacionales e inter-
nacionales, evidencias científicas, resultados de
estudios y prácticas a nivel curricular, de manera
tal que se pudiera ponderar la mayor cantidad de
referentes teóricos y metodológicos para apoyar el
Proceso de Revisión y Actualización Curricular, de
forma que el sistema educativo dominicano pue-
da estar en sintonía con las demandas y expecta-
tivas locales y globales, al tiempo que se fortalece
el proceso de otorgar direccionalidad a los planes
de acción pedagógica intencionada alrededor del
currículo diseñado, asegurando su coherencia res-
pecto a las finalidades y orientaciones curriculares
desde la práctica.
El Proceso de Revisión y Actualización Curricu-
lar valora todo lo positivo y rescatable del Diseño
Curricular que se revisa, asignándole todo el peso
que tiene tomar en cuenta la experiencia previa.
Este proceso se erige sobre un marco teórico-meto-
dológico articulador del Enfoque de Competencias
y el Constructivismo Socio-cultural, redimensiona
las características de los sujetos en sus respectivos
contextos de actuación, el rol protagónico de los
estudiantes y las estudiantes como sujetos de de-
recho que cada día van construyendo sus conoci-
mientos en situaciones de aprendizaje concretas, a
partir de la conexión con sus experiencias, viven-
cias y saberes previos, lo cual también se expresa
con gran claridad en los Fundamentos Curriculares
vigentes.
Desde esta perspectiva, se resignifica la toma
de conciencia en relación a la direccionalidad del
diseño curricular, a la intencionalidad pedagógi-
ca de las y los educadores como facilitadores de
procesos de aprendizajes significativos, asumiendo
que todos los actores educativos del proceso edu-
cativo aprenden los unos de los otros, articulando
y movilizando conocimientos, destrezas, valores
y actitudes para actuar con independencia, auto-
nomía y creatividad progresivos en las diferentes
situaciones en que la vida les coloque.
Desde la Consulta Técnica se visualizaron las
siguientes Etapas del Proceso (MINERD, 2016
a
):
Etapa 1. Identificación de criterios para la
revisión
“En esta etapa se recopilaron las demandas y
aspiraciones de la ciudadanía recogidas durante
la consulta social, se identificaron y definieron los
siguientes criterios técnicos en relación a: a) carac-
terísticas y necesidades de la sociedad dominicana
actual, b) los resultados de evaluaciones e investi-
gaciones del currículo dominicano, c) los nuevos
desarrollos de las disciplinas científicas, humanísti-
cas, artísticas y tecnológicas asociadas a las áreas
del currículo, d) las políticas y objetivos trazados en
los planes de desarrollo del país, y e) las conside-
raciones sobre el desarrollo cognoscitivo, afectivo
y psicosocial.”
Etapa 2. Deliberación y toma de decisio-
nes en torno a los cambios que han de ser in-
troducidos.
“En esta etapa se organizó y coordinó el pro-
ceso de deliberación en torno a las modificacio-
nes que se realizarían al currículo. Partiendo de los
FaCEtas Educativas
43
DE FONDO
productos elaborados en la Etapa 1 y de fuentes
bibliográficas pertinentes, se realizó la revisión del
diseño curricular vigente y se tomaron las decisio-
nes sobre los aspectos que serían modificados”.
Etapa 3. Redacción del diseño revisado y
actualizado en versión preliminar.
“En esta etapa, partiendo de los criterios de
revisión identificados en la Etapa 1 y sobre la base
de los acuerdos construidos en la Etapa 2 se pro-
cedió a la redacción del diseño curricular revisado,
el cual no se consideró un producto terminado.
Este documento agotó una etapa final de valida-
ción durante su primer año de implementación
(2013-2014). Durante este período se realizaron
consultas a docentes de distintas regiones del país.
A partir de sus sugerencias y recomendaciones se
corrigió y se enriqueció la versión preliminar de la
propuesta de diseño”, y así sucesivamente se han
ido compartiendo las producciones curriculares
por un año con la comunidad educativa para su
retroalimentación y posteriormente se incorporan
los aportes realizados durante el Proceso de Vali-
dación, lo cual enriquece significativamente las dis-
tintas producciones.
Tanto desde la Consulta Social como desde la
Consulta Técnica se buscó consolidar un espacio
de participación del profesorado, de los directivos,
especialistas de las distintas áreas del conocimien-
to, de la comunidad científica y psicopedagógica,
así como personas, organizaciones, instituciones,
sectores que social y técnicamente pudieran reali-
zar aportes de significación para la mejora sustan-
tiva del diseño curricular en proceso de revisión y
actualización, participaron de manera activa para
desde el proceso de Revisión y Actualización Cu-
rricular realizar aportes que contribuyan para que
desde el propio desarrollo del currículo se promue-
van verdaderas oportunidades de aprendizajes
para las niñas, niños, jóvenes y personas adultas
en todos los niveles, modalidades y subsistemas,
desde una perspectiva de inclusión, equidad, per-
tinencia y calidad.
El Proceso de Revisión y Actualización Curri-
cular desde sus propias esencias integra y acoge
de manera coherente el postulado que emana
tanto del artículo 64 de la Ley General de Educa-
ción 66’97, como de los Fundamentos Curriculares
cuando establece que el Currículo dominicano es:
• Flexible: es decir que responde a las es-
pecificidades de los diferentes niveles, ci-
clos y grados; a las características de los
estudiantes y a las capacidades de los edu-
cadores, así como a las peculiaridades y
necesidades de las diversas regiones y co-
munidades del país.
• Abierto a su enriquecimiento, a medida
que las exigencias de la sociedad lo requie-
ran y/o el desarrollo de la ciencia y la tec-
nología
• Participativo, procurando la intervención
de los diferentes sectores de la sociedad en
las distintas etapas de su desarrollo.
¿Qué se Integra al Currículo Revisado y
Actualizado?
Por Mandato del Plan Decenal de Educación
2008-2018, al currículo revisado y actualizado se
Se analizaron experiencias nacionales
e internacionales, evidencias
científicas, resultados de estudios y
prácticas a nivel curricular, de manera
tal que se pudieran ponderar la
mayor cantidad de referentes teóricos
y metodológicos para apoyar el
Proceso de Revisión y Actualización
Curricular
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FaCEtas Educativas
DE FONDO
le integra el Enfoque de Educación por Competen-
cias (SEE, 2008).
En el marco del diseño curricular Revisado y
Actualizado, las competencias se asumen como la
“Capacidad para actuar de manera eficaz y au-
tónoma en contextos diversos movilizando de
manera integrada conceptos, procedimientos,
actitudes y valores. Estas se desarrollan de
forma gradual en un proceso que se mantiene a
lo largo de toda la vida y tienen como finalidad
la realización personal, el mejoramiento de la
calidad de vida y el desarrollo de la sociedad
en equilibrio con el medio ambiente” (MINERD,
2016
a
).
Tipos de competencias
El Diseño Curricular Revisado y Actualizado se
ha estructurado en función de tres tipos de com-
petencias: fundamentales, específicas y laborales-
profesionales.
Competencias fundamentales: desde estas
se expresan las intenciones educativas de mayor
relevancia y significatividad, asumiéndose como
competencias transversales que permiten conec-
tar de forma significativa todo el currículo. Desde
las Bases Curriculares que orientan el Proceso de
Revisión y Actualización Curricular, se consideran
esenciales para el desarrollo pleno integral del ser
humano en sus distintas dimensiones, y están sus-
tentadas en los principios de los derechos huma-
nos y en los valores universales.
Desde las competencias fundamentales se
describen las capacidades necesarias para la rea-
lización de las individualidades de las y los estu-
diantes, para su adecuado aporte y participación
en los procesos democráticos, haciendo énfasis en
la movilización del conocimiento, así como en la
funcionalidad del aprendizaje que posibilita la in-
tegración y la articulación de conocimientos proce-
dentes de diversas fuentes en un contexto especí-
fico, dando lugar a un aprendizaje significativo. La
adopción de ese enfoque realza y coloca en primer
plano un conjunto de principios presentes en los
Fundamentos del Currículum.
Las competencias fundamentales del currí-
culo dominicano asumidas por consenso son las
siguientes:
1. Competencia Ética y Ciudadana
2. Competencia Comunicativa
3. Competencia Pensamiento Lógico, Crítico y
Creativo
4. Competencia Resolución de Problemas
5. Competencia Científica y Tecnológica
6. Competencia Ambiental y de la Salud
7. Competencia Desarrollo Personal y Espiritual
Tanto desde la Consulta Social como
desde la Consulta Técnica se buscó
consolidar un espacio de participación
del profesorado, de los directivos,
especialistas de las distintas áreas
del conocimiento, de la comunidad
científica y psicopedagógica, así
como personas, organizaciones,
instituciones, sectores que social
y técnicamente pudieran realizar
aportes de significación para la
mejora sustantiva del diseño
curricular en proceso de revisión y
actualización,...
Competencias específicas: Estas corres-
ponden a las áreas curriculares. Se refieren a las
capacidades que el estudiantado debe adquirir y
desarrollar con la mediación de cada área del co-
nocimiento. Se orientan a partir de las competen-
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DE FONDO
cias fundamentales y apoyan su concreción garan-
tizando la coherencia del currículo en términos de
los aprendizajes.
Competencias laborales-profesionales:
Están referidas al desarrollo de capacidades vincu-
ladas al mundo del trabajo. Preparan a las y los
estudiantes para la adquisición y desempeño de
niveles laborales-profesionales específicos y para
solucionar los problemas derivados del cambio en
las situaciones de trabajo. Esas competencias están
presentes en las distintas especialidades de las mo-
dalidades técnico-profesionales y en las artes, así
como en la formación laboral que incluyen los sub-
sistemas de Educación de Personas Jóvenes y Adul-
tas y Educación Especial. Estas incluyen los concep-
tos, procedimientos, actitudes y valores necesarios
para un determinado desempeño, así como el o los
contextos en que se movilizarán y aplicarán estos
conocimientos.
La meta del Proceso de Revisión y Actualización
Curricular es contar con un CURRÍCULO REVISA-
DO, ACTUALIZADO Y COHERENCIADO que apo-
ye los procesos formativos de las y los estudiantes
desde los niveles Inicial, Primario, Secundario, con
sus modalidades (Técnico-Profesional, Académica y
en Artes), así como desde el Subsistema Educación
de Adultos y el Sub-Sistema de Educación Espe-
cial, propiciando MÁS Y MEJORES APRENDIZAJES
PARA LAS Y LOS ESTUDIANTES, en perspectiva de
desarrollo humano pleno e integral.
El Currículo se constituye en referente cualita-
tivo de primer orden, desde donde se expresa y se
sustenta con intencionalidad el tipo de ser humano
que demanda y a que aspira la sociedad, para ex-
pandir al máximo todo su potencial en las distintas
dimensiones de su ser y para el ejercicio de sus de-
rechos y deberes ciudadanos, razón por la que el
diseño curricular revisado y actualizado habrá de
constituirse en uno de los referentes de significa-
ción para apoyar los procesos de formación inicial
y continua de los y las docentes en las Instituciones
de Educación Superior, en búsqueda de acerca-
miento y coherenciación de las intencionalidades
formativas, tendiéndose un puente y una alianza
estratégica de gran valor entre las demandas del
Sistema Educativo Dominicano y las instituciones
formadoras.
También el Proceso de Revisión y Actualización
Curricular se articula con políticas educativas tales
como la JORNADA ESCOLAR EXTENDIDA, el Plan
Nacional de Protección y Atención Integral a la Pri-
mera Infancia “QUISQUEYA EMPIEZA CONTIGO,
el Plan Nacional de Alfabetización, “QUISQUEYA
APRENDE CONTIGO”, entre otros, como una ma-
nera de propiciar más y mejores oportunidades
formativas desde una visión de mejora continua
de la calidad para garantizar procesos educativos
incluyentes y participativos en todos los contextos
socioculturales. Estas experiencias se encuentran
en un progresivo proceso de expansión y mejora
continua de su calidad, asumido como una cons-
trucción conjunta desde la participación y el com-
promiso de todos los actores en diversidad de con-
textos socioculturales.
Por último, recientemente fue celebrado el Foro
Mundial sobre la Educación 2015 en Incheon, desde
donde se aprobó la Declaración de Incheon para la
Educación 2030 (UNESCO/ UNICEF, Banco Mundial,
UNFPA, PNUD, ONU Mujeres y el ACNUR, 2015), en
la que se presentan nuevas perspectivas y nuevos
desafíos para la visión de la educación para los
próximos quince (15) años. Entre los compromisos
que se asumen y los objetivos que se plantean al
2030 compartimos los primeros cinco (5):
• Poner fin a la pobreza en todas sus formas
en todo el mundo
• Poner fin al hambre, lograr la seguridad
alimentaria y la mejora de la nutrición y
promover la agricultura sostenible
• Garantizar una vida sana y promover el
bienestar para todos en todas las edades
• Garantizar una educación inclusiva,
equitativa y de calidad y promover
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FaCEtas Educativas
DE FONDO
oportunidades de aprendizaje durante
toda la vida para todos
• Lograr la igualdad entre los géneros y em-
poderar a todas las mujeres y las niñas
En este contexto, merece especial atención el
objetivo No. 4, que tiene como metas que nos com-
prometen con la mejora de la calidad de la oferta
formativa de las y los estudiantes, las siguientes:
4.1 De aquí a 2030, asegurar que todas las ni-
ñas y todos los niños terminen la enseñanza prima-
ria y secundaria, que ha de ser gratuita, equitativa
y de calidad y producir resultados de aprendizaje
pertinente y efectivo
4.2 De aquí a 2030, asegurar que todas las
niñas y todos los niños tengan acceso a servicios
de atención y desarrollo en la primera infancia y
educación preescolar de calidad, a fin de que estén
preparados para la enseñanza primaria
4.3 De aquí a 2030, asegurar el acceso iguali-
tario de todos los hombres y las mujeres a una for-
mación técnica, profesional y superior de calidad,
incluida la enseñanza universitaria
4.4 De aquí a 2030, aumentar considerable-
mente el número de jóvenes y adultos que tienen
las competencias necesarias, en particular técnicas
y profesionales, para acceder al empleo, el trabajo
decente y el emprendimiento
4.5 De aquí a 2030, eliminar las disparidades
de género en la educación y asegurar el acceso
igualitario a todos los niveles de la enseñanza y la
formación profesional para las personas vulnera-
bles, incluidas las personas con discapacidad, los
pueblos indígenas y los niños en situaciones de
vulnerabilidad
4.6 De aquí a 2030, asegurar que todos los
jóvenes y una proporción considerable de los adul-
tos, tanto hombres como mujeres, estén alfabeti-
zados y tengan nociones elementales de aritmética
4.7 De aquí a 2030, asegurar que todos los
alumnos adquieran los conocimientos teóricos y
prácticos necesarios para promover el desarrollo
sostenible (Ibíd, objetivo 4)
Como se puede ver, tenemos grandes retos
por delante para la mejora de las oportunidades
educativas con calidad sin ningún tipo de exclu-
sión. En este contexto, todo proceso relacionado
con el desarrollo curricular implica un compromiso
de Estado con el desarrollo personal y social de los
sujetos, asÍ como con la construcción de la mejora
y con el desarrollo de buenas prácticas en todos los
niveles, modalidades y subsistemas.Implica, ade-
más, una mirada esperanzadora ante los tantos re-
tos que están planteados en tiempos difíciles y en
tiempos complejos que, a su vez, nos plantean ini-
ciativas y estrategias inspiradoras para desafiarlos.
La tarea y la misión es redoblar el compromi-
so ético con la mejora de la calidad de la oferta
formativa, para afrontar los cambios y las trans-
formaciones del presente y del porvenir, así como
una profunda mirada crítico-propositiva del com-
promiso de educar con criterios de calidad bajo el
marco de un liderazgo comprometido con el hecho
de que en la escuela y en la educación están cen-
tradas grandes aspiraciones y esperanzas para el
pleno desarrollo humano y social, y que esto de-
manda de políticas sostenidas a largo plazo para
el fortalecimiento de un compromiso social a favor
de procesos de formación integrales e inclusivos.
Desde el Sistema Educativo Dominicano se
pondera la necesidad de contribuir de manera
conjunta y articulada a los aprendizajes de los y las
estudiantes, siempre en perspectiva de una educa-
ción inclusiva, pertinente y de calidad, de la mano
de una comunidad educativa convencida de que
en esa oferta educativa está cifrada la concreción
de aspiraciones y sueños de superación de los ciu-
dadanos, ciudadanas y de todas sus familias.
Lo anterior se plantea como un gran reto para
el Sistema Educativo Dominicano, para las acade-
mias, para la comunidad educativa como un todo
armónico y sistémico, en el marco de una gestión
FaCEtas Educativas
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DE FONDO
escolar centrada en los aprendizajes, en las altas
expectativas de logro de los estudiantes y las es-
tudiantes, así como en la nueva cultura de corres-
ponsabilidad y compromiso con los resultados.
Políticas innovadoras, tales como la Jornada
Escolar Extendida, demandan de un gran compro-
miso con una serie de factores asociados que van
más allá del propio Proceso de Revisión y Actua-
lización Curricular, justo para garantizar que más
tiempo en la escuela ha de estar asociado a más y
mejores procesos de aprendizaje, incluidos todos
los factores asociados para que la escuela, además
de constituirse en escenario idóneo para el desa-
rrollo humano pleno e integral, se constituya en un
poderoso factor de protección social.
¿Qué está en juego? Está en juego la forma-
ción de los sujetos creativos, críticos, propositivos,
para el ejercicio libre y democrático de sus derechos
y de sus deberes, la construcción de una nueva ciu-
dadanía y de una nueva cultura valoradora de la
ciencia, del conocimiento, de los contextos locales
y globales, así como de las relaciones para el forta-
lecimiento de sus capacidades y de sus posibilida-
des para potenciar ese desarrollo humano pleno e
integral de sus competencias a lo largo de toda la
vida. También está en juego la redefinición de una
conciencia holística en relación a quiénes somos,
hacia dónde vamos y cuánto podemos lograr a
partir de involucrarnos en procesos de aprendizaje
altamente colaborativos, motivantes e inclusivos,
incorporando la riqueza que ofrece la pluralidad de
ideas y la diversidad de contextos socioculturales,
manteniendo siempre las más altas expectativas de
logro en todo el estudiantado.
Estamos en el tiempo en el que se asume con
plena convicción el hecho de que todas y todos,
sin ningún tipo de exclusión ni de discriminación,
estamos retados y retadas para contar con más y
mejores oportunidades y posibilidades formativas,
como base para sustentar el desarrollo humano
pleno y digno, que desde la ética del compromiso
social con el mejoramiento de la calidad de vida
merecemos.
La sociedad y la comunidad educativa están de-
safiadas en todos los niveles y en todos los ámbitos
para continuar apostando al mejoramiento de la
educación de sus ciudadanas y ciudadanos, como
sujetos de derecho que colocan en la educación
el horizonte de sus sueños y de sus esperanzas de
vida en perspectiva de plenitud y de trascendencia.
Hay pasos importantes que se vienen dando
desde la academia y desde el sector educativo que
auguran cambios auspiciosos, asumidos desde la
sistematicidad del compromiso y desde la mirada
focalizada en todos los factores asociados que es
importante tomar en consideración. Asumir el de-
safío para garantizarle a la ciudadanía más y mejo-
res procesos formativos se constituye en una opor-
tunidad impostergable, para propiciar cambios y
mejoras sostenibles en los distintos contextos so-
cioculturales en materia educativa, para lo cual to-
das y todos tenemos mucho que aportar.
El propio Proceso de Revisión y de Actualiza-
ción Curricular, como parte de un trabajo en equi-
po y como una construcción conjunta, se constitu-
ye en una permanente invitación abierta y cordial
para buscar aliados que se involucren con la cons-
trucción de la mejora continua, asumiendo que
toda propuesta es perfectible desde la práctica en
la cual se va haciendo camino; de ahí que se reci-
ben todos los aportes y todas las sugerencias de
mejora y de retroalimentación, con gran regocijo y
con gran valoración.
En tal sentido, desde el propio proceso se
extiende la más cordial invitación para continuar
caminando unidos, academias, Sistema Educativo
Dominicano desde el Ministerio de Educación, Mi-
nisterio de Educación Superior, Ciencia y Tecnolo-
gía), así como toda la comunidad educativa como
aliada.
Es vital que se continúe fortaleciendo el dere-
cho y la oportunidad educativa cada vez más cuali-
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FaCEtas Educativas
DE FONDO
ficada, para que cada niño, niña, joven, adolescen-
te y persona adulta, cuente con una base formativa
sólida, sustentada en los más elevados valores de
la ciencia, de la cultura y de la condición huma-
na, en íntima articulación con toda la riqueza que
aporta el medio natural y social, en perspectiva de
integralidad y apertura a la diversidad. De esta ma-
nera, se van dando pasos sostenidos hacia el forta-
lecimiento institucional, para continuar apoyando
los procesos de construcción de una sociedad cada
vez más pacífica, armónica y comprometida con
los valores de la democracia y con el desarrollo del
ser en plenitud.
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